Cronología de la lucha política por los derechos y libertades, por y para las mujeres mexicanas¹

El funcionamiento de nuestra democracia es reflejo de la valentía y convicción de hombres y mujeres que dispersaron sus ideas y usaron su fuerza moral y física para hacer posible el ejercicio de los derechos y libertades. Hoy esa lucha no ha terminado, es momento de continuar.

Sea nuestra casa, nuestro lugar de trabajo, el salón de clases, los espacios públicos, cualquier lugar es el escenario para demostrar nuestras inquietudes y aspiraciones, y de convertirnos en luchadoras y luchadores sociales.

Esta es una presentación literaria de las aportaciones de mujeres mexicanas que han ayudado en la construcción y el desarrollo de una sociedad más democrática, incluyente e igualitaria.

Siendo conscientes de que nuestro papel, particularmente el de las mujeres en la sociedad, no ha sido el más reconocido y respetado; y que, por lo contrario, ha transitado por grandes carencias, imperantes desigualdades y desmedidas responsabilidades que ponen en pausan nuestros logros y éxitos. Esta cronología visibiliza aquellos actos donde han sido mujeres las protagonistas, encabezando luchas, ocupando puestos clave y haciendo uso de los espacios públicos, desde tiempos de la Independencia, pasando por la Revolución, el desarrollo del México moderno y hasta nuestros días.

Esta no es sólo su historia, sino la historia de México.

¹ 50 años de voto de las mujeres.
Periódico La Jornada, 2003.
Consultado en: La jornada de oriente

 
 

Elecciones de diputados 2 de julio de 1967.
Archivo Gráfico de "El Nacional".
Fondo Temático, sobre176-E.
INEHRM.

 
 

1810


En 1810, nuestra forjadora Gertrudis Bocanegra Mendoza, en compañía de su familia se unió a la insurgencia. Fue una de las primeras mujeres en la que su colaboración fue crucial, siendo portadora de información relevante acerca de los movimientos de las fuerzas realistas en la lucha independentista. El ímpetu y firmeza de espíritu convirtieron a Gertrudis en una líder que logró cautivar a cientos para unirse a la lucha.

 
 

Elecciones federales, 7 de julio de 1958.
Archivo Gráfico de "El Nacional".
Fondo Temático, sobre176-B.
INEHRM.

 

Elecciones nacionales, 1965.
Archivo Gráfico de "El Nacional".
Fondo Temático, sobre176-E.
INEHRM.

 
 

1870


Para 1870 aparecía Rita Cetina, quien fundó junto con otras mujeres, la sociedad literaria y de Beneficencia "La Siempreviva". Este proyecto dio paso a la edición de la primera revista en México escrita por mujeres y para mujeres. Rita se destacó, además, por ser pionera en impulsar la formación educativa y la creación de escuelas para niñas de bajos recursos.

 
 

Elecciones, 5 de julio de 1970.
Archivo Gráfico de "El Nacional".
Fondo Temático, sobre176-C.
INEHRM.

 

Mujeres votando. 1955.
Archivo Gráfico de El Nacional, Fondo Personales, Sobre: 124.
INEHRM.

 
 

1887


En 1887, Laureana Wright fundaba la revista "Las hijas del Anáhuac", junto con otras mujeres, que también participaron en la dirección del contenido de la revista dirigida también, al público femenino. Entre sus páginas se cuestionaba el estilo de vida a la que estaban sometidas y controladas; llegando a cuestionar la posibilidad del voto femenino, pues no estaba considerado en la agenda política nacional.

 
 

Club femenil antirreeleccionista "Hijas de Cuauhtémoc" que concurrió a la casa de Francisco I. Madero, México, 02 de noviembre de 1911. © (5966) SECRETARÍA DE CULTURA.
INAH SINAFO FN MÉXICO.

 
 

1910


Ya en 1910, surge el movimiento las "Hijas de Cuauhtémoc". Conformado por mujeres que se oponían al gobierno de Porfirio Díaz, exigían, además, su participación política, respeto a sus derechos laborales e igualdad de género. La periodista Dolores Jiménez y Muro fue su principal promotora; ella encabezó la protesta contra el fraude electoral, bajo la consigna "Es tiempo de que las mujeres mexicanas reconozcan que sus derechos y obligaciones van más allá del hogar".

Fue a partir de la Revolución Mexicana que tuvo mayor visibilidad la reivindicación de los derechos políticos y la igualdad social femenina.

Sara Pérez, esposa de Francisco I. Madero, lo acompañó en cimentar el proyecto de construcción democrática, mostrándose capaz y comprometida a la lucha contra la reelección porfiriana. Sin duda, Sara Pérez, una mujer clave en el movimiento revolucionario de 1910.

Al mismo tiempo, otras mujeres ilustres, tal es el caso de Carmen Serdán quien junto con sus hermanos se unieron a la causa, esparciendo por las calles la inquietud de alcanzar un México con derechos y libertades a través de la voz y las armas.

Pero hay actos de heroísmo y valentía que merecen nuestro reconocimiento, como el realizado por María Hernández Zarco que, a sus 27 años, en medio de un contexto político y social abrumador perpetrado por la Revolución Mexicana, arriesgó su vida para imprimir y difundir el discurso de Belisario Domínguez, un discurso en donde se denunciaba la traición de Victoriano Huerta. Sin duda, un acto que frente al control del gobierno era seguro que habría represalias contra los opositores.

Tiempo después, fue perseguida y se mantuvo oculta pero siempre firme, años más tarde declaró en una entrevista que su deseo más profundo era el de tener una imprenta donde pudiera publicar sus ideas patrióticas.

 
 

Dolores Jiménez y Muro, periodista revolucionaria, retrato. 1910.
© (18906) SECRETARÍA DE CULTURA.
INAH.SINAFO.FN. MÉXICO.

 

Juana Belén Mendoza, ca. 1910, Colección Gráfica y de Sonido del INEHRM.

 
 

Foto P. Flores Pérez, Mujeres patriotas, ca. 1911.
Fotomecánico.
Acervo INEHRM.

 

Lázaro Gutiérrez de Lara y un grupo de mujeres en Ciudad Juárez. 1911.
Biblioteca del Congreso de Estados Unidos.

 
 

1916


En 1916 fue realizado el Primer Congreso Feminista en Yucatán, el cual logró una convocatoria de ¡700 mujeres! La finalidad de este congreso fue impulsar una agenda política en favor de sus derechos de las mujeres.

Ese mismo año, fue realizado el Segundo Congreso y Elvia Carrillo Puerto fue una de las más destacadas participantes. Sus principales planteamientos se centraron en los derechos ciudadanos, sexuales y reproductivos de las mujeres. Algo que despertó ovaciones y también, desaprobaciones.

Después de la Revolución Mexicana, Hermila Galindo solicitó al Congreso Constituyente de 1916-1917, que en ese momento se encontraba en los trabajos de reformar la Carta Magna, se incluyera el reconocimiento legal de los derechos políticos de las mujeres.

Fue Felipe Carrillo Puerto, gobernador de Yucatán quien, por primera vez en 1922, reconoció el derecho de las mujeres a participar en las elecciones municipales y del estado.

A partir de esta iniciativa, otros estados comenzaron por legalizar los derechos políticos de las mujeres.

Por ejemplo, en San Luis Potosí se aprobó la ley que permitía a las mujeres que sabían leer y escribir, a participar en los procesos electorales municipales y estatales.

En Puebla se reforma el art. 33 de la Ley Electoral, para dar reconocimiento a mujeres, instruyendo que "son electores y por lo mismo tiene derechos a ser inscritos en el padrón electoral los varones y mujeres poblanas".

Años más tarde, se da la mayor organización de mujeres hasta entonces. Eran convocadas para formar el sector femenino del Partido Nacional Revolucionario (PNR), lo que provocó la integración de asociaciones como:

           » Liga Orientadora de Acción Femenina, dirigida por Elvia Carrillo.
           » Bloque Nacional de Mujeres Revolucionarias, presidido por Florinda Lazos León.
           » Partido Feminista Revolucionario, donde Edelmira Rojas fue el primer dirigente femenil del PNR.
           » Confederación Femenil Mexicana, encabezada por María Ríos Cárdenas.

Una de las organizaciones más grande de mujeres fue el fundada por Refugio "Cuca" García Martínez, con el nombre de Frente Único Pro-Derechos de la Mujer (FUPDM), llegó a tener cerca de 50 mil afiliadas.

En 1937, las mexicanas fueron apoyadas por el entonces presidente Lázaro Cárdenas, quien anunció desde Veracruz, que "el gobierno no se detendrá únicamente a tratar cuestiones que interesen o más convengan a los hombres…" por lo que presentó ante las cámaras la reformas para que las mujeres quedaran incorporadas a la función social y política.

Fue enviada una iniciativa de reforma al art. 34. a la Cámara de Senadores, como primer paso para que las mujeres obtuvieran la ciudadanía.

Sin embargo, pasaron años para que esta reforma pudiera avanzar, ya que existieron obstaculizaciones políticas que detuvieron el proceso.

Fue hasta el 24 de diciembre de 1946 que la Cámara de Diputados aprobó la iniciativa enviada por el entonces presidente Miguel Alemán, en la que se adicionó el Artículo 115 Constitucional, que entró en vigor el 12 de febrero del siguiente año. Quedando establecido que en las elecciones municipales participarían las mujeres en igualdad de condiciones que los varones, con el derecho a votar y ser elegidas.

Otro gran momento fue el propiciado en 1941, a partir de que se crea la Alianza Nacional Femenina, por la necesidad de abrir espacios para las mujeres en puestos públicos de decisión. Como resultado, Matilde Rodríguez Cabo logró un nombramiento como jefa de departamento en la Secretaría de Gobernación y Palma Guillén fue nombrada embajadora en Colombia.

Entrando a la época de los años 50´s Amalia González Caballero, una distinguida líder política, maestra, y diplomática mexicana, se dio a la tarea de recaudar firmas de mujeres interesadas para plantear las modificaciones a la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, entre las que se encontraban: el reconocimiento de los derechos políticos y civiles de las mujeres.

Con esta trayectoria de triunfos, vemos como decenas de mujeres empiezan y fortalecen su carrera política ocupando puestos de elección popular, embajadas y liderando movimientos políticos que les permitieron llevar sus más grandes aspiraciones a la realidad.

Para 1960, México ya incorporaba en sus filas presidentas municipales, diputadas y senadoras tanto a nivel local como federal. María Lavalle Urbina llegó a ser la primera presidenta del Senado en 1967. Griselda Álvarez Ponce de León fue la primera mujer electa gobernadora de un estado, que fue Colima.

Con el paso del tiempo, el terreno ganado por mujeres se incrementó. Dando lugar a la creación de espacios exclusivos por y para su desarrollo. La Organización de las Naciones Unidas (ONU), por primera vez en 1975, establece el Año Internacional de la Mujer y el día 8 de marzo como la fecha conmemorativa. La ONU hace un llamado a las naciones para trabajar por la igualdad de género e incluso por la necesidad urgente de luchar contra la violencia a la que millones de mujeres padecieron y hoy continúa.

México no fue la excepción, se unió a este llamado y su labor ha sido tal que en 1985 creó la Comisión Nacional de la Mujer y más tarde, en 2001 el Instituto Nacional de las Mujeres, como instituciones que velan y generan las condiciones en igualdad de oportunidades y de trato entre los géneros; el ejercicio pleno de todos los derechos de las mujeres y su participación igualitaria en la vida política, cultural, económica y social del país.

Ha pasado ya más de un siglo, desde las mujeres iniciaron y protagonizaron la lucha para que se le reconozca. Hoy podemos decir que se ha marcado un parteaguas en la historia mexicana gracias a estas aportaciones que no solamente atañen a un grupo de la población, sino que, por lo contrario, benefician a todos los mexicanos, tienen un impacto directo en nuestra cultura política y el desarrollo democrático.

Hoy en México, son respetados y aplicados los principios de paridad de género para que por lo menos la mitad de los cargos de decisión sean ocupados por mujeres en los tres poderes del Estado, en los tres órdenes de gobierno, en los organismos autónomos, en las candidaturas de los partidos políticos a cargos de elección popular, así como la elección de representantes de los ayuntamientos municipales.

Llegamos al final de esta recopilación, sabiendo que la participación de las mujeres es histórica, que sus principales demandas estuvieron concentradas en gozar de los derechos y libertades que los hombres ya poseían. Conocimos algunos de los problemas a los que se enfrentaron durante años, mitigando su desarrollo.

El deseo de votar y ser votadas; de desenvolverse en un trabajo; a gozar de una educación; a poder militar políticamente y tener la oportunidad de acabar con la violencia, fue lo que impulsó la lucha.

Todavía quedan barreras que romper y estereotipos culturales y sociales que acabar, pero nuestra tarea es seguir fortaleciendo esta lucha.

Nuestra lucha.

 
 

María Hernández Zarco.
Ca. 1950. Fotomecánico.
INEHRM.

 

María Hernández Zarco imprimiendo el manifiesto de Belisario Domínguez.
Dibujo. Ca. 1970.
Fotomecánico.
Acervo INEHRM.

 
 

Doña María Hernández Zarco en el Senado de la República al recibir la medalla "Belisario Domínguez". 1963.
Archivo Gráfico de El Nacional, Fondo Personales, Sobre: 1372.
INEHRM.

 

María Hernández Zarco. Ca. 1960.
Archivo Gráfico de El Nacional, Fondo Personales, Sobre: 1372.
INEHRM.

 
 

Doña María Hernández Zarco en el Senado de la República al recibir la medalla "Belisario Domínguez".
1963.
Archivo Gráfico de El Nacional, Fondo Personales, Sobre: 1372.
INEHRM.

 

Convocatoria al Primer Congreso Feminista en Yucatán 1916.
Fotomecánico.
Acervo INEHRM.

 
 

General Salvador Alvarado, ca. 1915.
Fototeca Pedro Guerra.
Universidad Autónoma de Yucatán.

 

Salvador Alvarado con gente, retrato. 1916.
© (468179)
SECRETARÍA DE CULTURA. INAH.SINAFO.FN. MÉXICO.

 
 

Congreso Feminista en Yucatán, 1916. Fototeca Pedro Guerra, Universidad Autónoma de Yucatán.

 

Diario Oficial del Gobierno Constitucionalista del Estado de Yucatán, Mérida, lunes 17 de enero de 1916.
Primer Congreso Feminista de Yucatán.
Año XIX, Núm. 5880.
Hemeroteca Nacional. México.

 
 

La senadora Griselda Alvarez Ponce de León.
14 de febrero de 1977.
Archivo Gráfico El Nacional, Fondo Personales, sobre 10324.
INEHRM.
NP-10324-007.

 

En ocasión del 456 aniversario de la Defensa de Tenoctitlán, el licenciado José Luis Sánchez Rendón, funcionario del DDF y la senadora Griselda Álvarez Ponce de León, depositaron una ofrenda floral e hicieron una guardia de honor ante la estatua de Cuauhtémoc. A los extremos los acompañan representantes de la Suprema Corte de Justicia y la Cámara de diputados.
13 de agosto de 1977.
Archivo Gráfico El Nacional, Fondo Personales, sobre 10324.
INEHRM.
NP-10324-026.

 
 

La candidata del PRI a la gubernatura de Colima, senadora Griselda Álvarez, realizando vistas domiciliarias. 16 de marzo de 1979, Cuauhtémoc, Colima.
Archivo Gráfico El Nacional, Fondo Personales, sobre 10324.
INEHRM. NP-10324-0022.

 

La profesora Griselda Álvarez momentos antes de firmar el convenio para la Promoción del Trabajo Comunitario en Colima. 27 de noviembre de 1979. Archivo Gráfico El Nacional, Fondo Personales, sobre 10324. INEHRM. NP-10324-0022.

 
 

La candidata del PRI a la gubernatura de Colima, senadora Griselda Álvarez, realizando vistas domiciliarias. 16 de marzo de 1979, Cuauhtémoc, Colima. Archivo Gráfico El Nacional, Fondo Personales, sobre 10324. INEHRM. NP-10324-009.